Cómo gestionar las emociones

¿Qué es la gestión emocional?

La gestión emocional consiste en tomar conciencia de las emociones que sentimos, no rechazarlas y aprender a manejarlas, en función del contexto en el que nos hallemos.

Las emociones son estados afectivos que conllevan un mensaje sobre aquello que nos ocurre en relación a una situación o a una persona. Son adaptativas, es decir, nos ayudan a manejar nuestras propias necesidades. Las emociones básicas son el miedo, la tristeza, la rabia y la alegría.

A lo largo de nuestra vida hemos aprendido a relacionarnos con las emociones de forma adaptativa, o por el contrario, desadaptativa. Normalmente, el ambiente familiar es determinante e influye enormemente en ello. Por ejemplo, en algunas familias se rechaza la tristeza, es decir, está mal visto entristecerse. Por tanto, las personas que crezcan en un entorno familiar en el que no se permitan todas las emociones, probablemente aprenderán a relacionarse de forma negativa con ellas, no permitiéndoselas en su vida cotidiana.

En ocasiones, no se enseñan habilidades de gestión emocional, con lo que esto puede generar consecuencias en nosotros mismos, o incluso, con otras personas. En nuestras sesiones de terapia psicológica, enseñamos herramientas para gestionar las emociones.

Por otro lado, existen diferentes grados emocionales. Inicialmente, las percibimos con una intensidad leve, pero pueden ir aumentando en función de la persona y de la situación que estamos viviendo. En caso de que no las escuchemos, las vamos acumulando con el tiempo y pueden derivar en problemas de ansiedad, depresión u otros problemas psicológicos, físicos y/o emocionales.

 

¿Cómo gestionar mis emociones?

Existen diferentes herramientas y recursos para gestionar nuestras emociones. A continuación, te exponemos algunos de los pasos esenciales para empezar a desarrollar una adecuada gestión de las mismas.

  • Identifica y toma conciencia de la emoción

El primer paso, es aprender a darme cuenta, reconocer y poner nombre a la emoción que estoy sintiendo. Por ejemplo, ¿siento tristeza?, ¿siento enfado?, ¿siento alegría?, etc.

  • Permítete sentir y sostén la emoción.

Una vez identificada, toca sentirla. Deja que este presente en tu cuerpo, sin juzgarla ni rechazarla. Puedes sentir varias emociones al mismo tiempo, pero es fundamental no evitarlas.

  • Responsabilízate de ella y toma acción

Hazte cargo de lo que sientes y pregúntate: ¿qué quieres hacer con esto que sientes?, ¿qué estás necesitando?, ¿qué aspectos de tu vida tienes que modificar?, etc.

En este paso tenemos que escuchar con mayor profundidad el mensaje de la emoción para actuar y gestionar según nuestras preferencias y necesidades.

 

Si presentas dificultades para gestionar tus emociones, te sientes desconectado/a de la realidad, padeces ansiedad, depresión u otros problemas emocionales y todo ello, te genera malestar, causando un deterioro en tu vida cotidiana, en Mente Balú podemos ayudarte y acompañarte a aumentar tu bienestar emocional.

Caterina Teixidó

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